Sábado 8 de julio Audio Comentario EGW
LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Gálatas 2:1-14; 1 Corintios 1:10-13;
Génesis 17:1-21; Juan 8:31-36; Colosenses 3:11.
PARA MEMORIZAR: “Completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el
mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa” Fil. 2:2 ( CB ) ).
EL REFORMADOR PROTESTANTE JUAN CALVINO creía que la
desunión y la división eran la estratagema principal del diablo contra la
iglesia, y advirtió que los cristianos deberían evitar el cisma como la peste.
Pero ¿debería preservarse la unidad a costa de la verdad? Imagina si Martín Lutero, el padre de la Reforma protestante, hubiera escogido, en nombre de la unidad, retractarse de su postura sobre la salvación solo por la fe cuando fue llevado a juicio en la Dieta de Worms.
“Si el reformador hubiera cedido en un solo punto, Satanás y sus ejércitos habrían ganado la victoria. Pero la inquebrantable firmeza de él fue el medio de emancipar a la iglesia, y de iniciar una era nueva y mejor” (CS 153).
En Gálatas 2:1 al 14, encontramos al apóstol haciendo todo lo que está en su poder para mantener la unidad del círculo apostólico en medio de los intentos de destruirlo por parte de algunos creyentes. Pero, por más importante que esa unidad haya sido para Pablo, se rehusó a permitir que la verdad del evangelio fuera traicionada para alcanzarla. Aunque hay lugar para la diversidad dentro de la unidad, el evangelio nunca debe ser traicionado en el proceso.
Pero ¿debería preservarse la unidad a costa de la verdad? Imagina si Martín Lutero, el padre de la Reforma protestante, hubiera escogido, en nombre de la unidad, retractarse de su postura sobre la salvación solo por la fe cuando fue llevado a juicio en la Dieta de Worms.
“Si el reformador hubiera cedido en un solo punto, Satanás y sus ejércitos habrían ganado la victoria. Pero la inquebrantable firmeza de él fue el medio de emancipar a la iglesia, y de iniciar una era nueva y mejor” (CS 153).
En Gálatas 2:1 al 14, encontramos al apóstol haciendo todo lo que está en su poder para mantener la unidad del círculo apostólico en medio de los intentos de destruirlo por parte de algunos creyentes. Pero, por más importante que esa unidad haya sido para Pablo, se rehusó a permitir que la verdad del evangelio fuera traicionada para alcanzarla. Aunque hay lugar para la diversidad dentro de la unidad, el evangelio nunca debe ser traicionado en el proceso.
Reavivados por su Palabra: Hoy, Isaías 49 – Durante esta semana, PR cap.
31.
Domingo 9 de julio Audio Dialogo Bíblico Comentario EGW
Domingo 9 de julio Audio Dialogo Bíblico Comentario EGW
LA IMPORTANCIA DE LA UNIDAD
Lee 1 Corintios 1:10 al 13 ( CB ) . ¿Qué nos dice este pasaje acerca de
cuán importante consideraba Pablo que era la unidad en la iglesia?
Habiendo refutado las alegaciones de que su evangelio no provenía de
Dios, Pablo dirige su atención, en Gálatas 2:1 y 2 ( CB ) , a otra acusación que se hacía en su
contra. Los falsos maestros de Galacia afirmaban que el evangelio de Pablo no
estaba en armonía con lo que enseñaban Pedro y los demás apóstoles. Pablo,
decían, era un renegado.
En respuesta a esta acusación, Pablo relata un viaje que hizo a Jerusalén por lo menos catorce años después de su conversión. Aunque no estamos totalmente seguros de cuándo ocurrió ese viaje, ningún viaje en la antigüedad era asunto fácil. Si viajó por tierra desde Antioquía hasta Jerusalén, el viaje de casi quinientos kilómetros habría llevado por lo menos tres semanas, y habría implicado todo tipo de dificultades y peligros. Sin embargo, a pesar de esas dificultades, Pablo realizó el viaje, no porque lo hubieran mandado a llamar los apóstoles, sino porque el Espíritu lo motivó. Y, mientras estuvo allí, presentó su evangelio ante los apóstoles.
¿Por qué hizo eso? Evidentemente, no porque tuviera dudas en cuanto a lo que estaba enseñando. Ciertamente, no necesitaba ningún tipo de garantía por parte de ellos. Después de todo, ya había estado proclamando el mismo evangelio durante catorce años. Y, aunque tampoco necesitaba el permiso ni la aprobación de ellos, valoraba el apoyo y el ánimo de los demás apóstoles.
Por lo tanto, la acusación de que su mensaje era diferente no era solamente un ataque hacia Pablo sino también un ataque a la unidad de los apóstoles, y a la iglesia misma. Mantener la unidad apostólica era vital, porque una división entre la misión gentil de Pablo y la iglesia madre en Jerusalén habría tenido consecuencias desastrosas. Sin comunión entre los cristianos gentiles y judíos, “Cristo estaría dividido, y toda la energía que Pablo había dedicado, y que esperaba dedicar, a la evangelización del mundo gentil, habría quedado frustrada”.–F. F. Bruce, The Epistle to the Galatians, p. 111.
¿Cuáles son algunos de los temas que amenazan la unidad de la iglesia hoy? Lo que es más importante, luego de definirlos, ¿cómo los resolvemos? ¿Qué asuntos son más importantes que la unidad misma?
En respuesta a esta acusación, Pablo relata un viaje que hizo a Jerusalén por lo menos catorce años después de su conversión. Aunque no estamos totalmente seguros de cuándo ocurrió ese viaje, ningún viaje en la antigüedad era asunto fácil. Si viajó por tierra desde Antioquía hasta Jerusalén, el viaje de casi quinientos kilómetros habría llevado por lo menos tres semanas, y habría implicado todo tipo de dificultades y peligros. Sin embargo, a pesar de esas dificultades, Pablo realizó el viaje, no porque lo hubieran mandado a llamar los apóstoles, sino porque el Espíritu lo motivó. Y, mientras estuvo allí, presentó su evangelio ante los apóstoles.
¿Por qué hizo eso? Evidentemente, no porque tuviera dudas en cuanto a lo que estaba enseñando. Ciertamente, no necesitaba ningún tipo de garantía por parte de ellos. Después de todo, ya había estado proclamando el mismo evangelio durante catorce años. Y, aunque tampoco necesitaba el permiso ni la aprobación de ellos, valoraba el apoyo y el ánimo de los demás apóstoles.
Por lo tanto, la acusación de que su mensaje era diferente no era solamente un ataque hacia Pablo sino también un ataque a la unidad de los apóstoles, y a la iglesia misma. Mantener la unidad apostólica era vital, porque una división entre la misión gentil de Pablo y la iglesia madre en Jerusalén habría tenido consecuencias desastrosas. Sin comunión entre los cristianos gentiles y judíos, “Cristo estaría dividido, y toda la energía que Pablo había dedicado, y que esperaba dedicar, a la evangelización del mundo gentil, habría quedado frustrada”.–F. F. Bruce, The Epistle to the Galatians, p. 111.
¿Cuáles son algunos de los temas que amenazan la unidad de la iglesia hoy? Lo que es más importante, luego de definirlos, ¿cómo los resolvemos? ¿Qué asuntos son más importantes que la unidad misma?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Isaías 50 – Durante esta semana, PR cap.
31.
LA CIRCUNCISIÓN Y LOS FALSOS HERMANOS
¿Por qué la circuncisión era un punto tan importante en la disputa entre Pablo y ciertos cristianos judíos? Ver Génesis 17:1 al 22 ( CB ) ; Gálatas 2:3 al 5 ( CB ) ; 5:2 y 6 ( CB ) ; y Hechos 15:1 y 5 ( CB ) . ¿Por qué no es tan difícil entender cómo algunos pudieron haber creído que incluso los gentiles debían circuncidarse?
La circuncisión era la señal de la relación de pacto que Dios estableció con Abraham, el padre de la nación judía. Aunque la circuncisión era solamente para los descendientes varones de Abraham, todos estaban invitados a entrar en una relación de pacto con Dios. La señal de la circuncisión fue dada a Abraham en Génesis 17. Esto ocurrió después del intento
¿Por qué la circuncisión era un punto tan importante en la disputa entre Pablo y ciertos cristianos judíos? Ver Génesis 17:1 al 22 ( CB ) ; Gálatas 2:3 al 5 ( CB ) ; 5:2 y 6 ( CB ) ; y Hechos 15:1 y 5 ( CB ) . ¿Por qué no es tan difícil entender cómo algunos pudieron haber creído que incluso los gentiles debían circuncidarse?
La circuncisión era la señal de la relación de pacto que Dios estableció con Abraham, el padre de la nación judía. Aunque la circuncisión era solamente para los descendientes varones de Abraham, todos estaban invitados a entrar en una relación de pacto con Dios. La señal de la circuncisión fue dada a Abraham en Génesis 17. Esto ocurrió después del intento
desastroso de Abraham, al tener un hijo con la sierva egipcia de su
esposa, de ayudar a Dios a cumplir la promesa que le hizo de darle un hijo.
La circuncisión era una señal adecuada para el Pacto. Era un recordatorio de que los mejores planes humanos nunca pueden lograr lo que Dios ha prometido.
La circuncisión exterior debía ser un símbolo de la circuncisión del corazón (Deut. 10:16 ( CB ) ; 30:6 ( CB ) ; Jer. 4:4 ( CB ) ; Rom. 2:29 ( CB ) ). Representa despojarnos de la confianza en nosotros mismos y, en cambio, depender fielmente de Dios.
Sin embargo, en la época de Pablo, la circuncisión se había convertido en una señal preciada de identidad nacional y religiosa; eso no era lo que debía representar originalmente. Alrededor de 150 años antes del nacimiento de Jesús, algunos patriotas por demás celosos no solamente forzaron a todos los judíos no circuncidados de Palestina a circuncidarse, sino también se lo exigieron a todos los hombres que vivían en las naciones circundantes que estaban bajo su jurisdicción.
Algunos hasta creían que la circuncisión era un pasaporte para la salvación. Esto puede verse en inscripciones antiguas que confiadamente declaran cosas como: “Los hombres circuncidados no descienden al Gehenna [infierno]”.–C. E. B. Cranfield, A Critical and Exegetical Commentary on the Epistle to the Romans, p. 172. Sería un error suponer que Pablo se oponía a la circuncisión misma. Lo que Pablo objetaba era la insistencia de que los gentiles debían someterse a la circuncisión.
Los falsos maestros decían: “Si no os circuncidáis conforme al rito de Moisés, no podéis ser salvos” (Hech. 15:1). El problema, entonces, no tenía que ver realmente con la circuncisión, sino con la salvación. La salvación es o solo por la fe en Cristo o por algo que se puede obtener mediante la obediencia humana.
Quizás hoy el problema no sea la circuncisión. Pero ¿con qué cosas, si las hay, luchamos como iglesia, que se asemejan a este problema?
La circuncisión era una señal adecuada para el Pacto. Era un recordatorio de que los mejores planes humanos nunca pueden lograr lo que Dios ha prometido.
La circuncisión exterior debía ser un símbolo de la circuncisión del corazón (Deut. 10:16 ( CB ) ; 30:6 ( CB ) ; Jer. 4:4 ( CB ) ; Rom. 2:29 ( CB ) ). Representa despojarnos de la confianza en nosotros mismos y, en cambio, depender fielmente de Dios.
Sin embargo, en la época de Pablo, la circuncisión se había convertido en una señal preciada de identidad nacional y religiosa; eso no era lo que debía representar originalmente. Alrededor de 150 años antes del nacimiento de Jesús, algunos patriotas por demás celosos no solamente forzaron a todos los judíos no circuncidados de Palestina a circuncidarse, sino también se lo exigieron a todos los hombres que vivían en las naciones circundantes que estaban bajo su jurisdicción.
Algunos hasta creían que la circuncisión era un pasaporte para la salvación. Esto puede verse en inscripciones antiguas que confiadamente declaran cosas como: “Los hombres circuncidados no descienden al Gehenna [infierno]”.–C. E. B. Cranfield, A Critical and Exegetical Commentary on the Epistle to the Romans, p. 172. Sería un error suponer que Pablo se oponía a la circuncisión misma. Lo que Pablo objetaba era la insistencia de que los gentiles debían someterse a la circuncisión.
Los falsos maestros decían: “Si no os circuncidáis conforme al rito de Moisés, no podéis ser salvos” (Hech. 15:1). El problema, entonces, no tenía que ver realmente con la circuncisión, sino con la salvación. La salvación es o solo por la fe en Cristo o por algo que se puede obtener mediante la obediencia humana.
Quizás hoy el problema no sea la circuncisión. Pero ¿con qué cosas, si las hay, luchamos como iglesia, que se asemejan a este problema?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Isaías 51 – Durante esta semana, PR cap.
31.
UNIDAD EN LA DIVERSIDAD
- Lee Gálatas 2:1 al 10 ( CB ) . Pablo habla de los falsos
hermanos, “introducidos a escondidas, que entraban para espiar nuestra
libertad que tenemos en Cristo Jesús, para reducirnos a esclavitud” (Gál. 2:4 ( CB ) ). ¿De qué son libres los
cristianos? Lee Juan 8:31 al 36 ( CB ) ; Romanos 6:6 y 7 ( CB ) ; 8:2 y 3 ( CB ) ; Gálatas 3:23 al 25 ( CB ) ; 4:7 y 8 ( CB) ; y Hebreos 2:14 y 15 ( CB ) . ¿Cómo experimentamos la realidad
de esta libertad en nosotros mismos?
La libertad, como una descripción de la experiencia cristiana, es un
concepto importante para Pablo. Él utiliza esta palabra con más frecuencia que
cualquier otro autor en el Nuevo Testamento, y en el libro de Gálatas las
palabras libre y libertad aparecen numerosas veces. La libertad para el
cristiano, sin embargo, significa libertad en Cristo. Es la oportunidad de vivir
una vida de devoción a Dios sin estorbos. Implica libertad de estar
esclavizados a los deseos de nuestra naturaleza pecaminosa (Rom. 6), libertad
de la condenación de la Ley (Rom. 8:1, 2) y libertad del poder de la muerte (1
Cor. 15:55).
- Los
apóstoles reconocían que a Pablo le “había sido encomendado el evangelio
de la incircuncisión, como a Pedro el de la circuncisión” (Gál. 2:7 ( CB ) ). ¿Qué sugiere esto acerca
de la naturaleza de la unidad y la diversidad dentro de la iglesia?
Los apóstoles reconocían que Dios había llamado a Pablo para predicar el
evangelio a los gentiles, así como había llamado a Pedro para predicarles a los
judíos. En ambos casos, el evangelio era el mismo, pero el modo en que era
presentado dependía de las personas a las que los apóstoles intentaban
alcanzar. En este versículo, está implícito “el reconocimiento importante de
que una misma fórmula puede ser escuchada de modo diferente y tendrá diferente
fuerza en contextos sociales y culturales diferentes. […] Es precisamente esta
unicidad lo que forma la base de la unidad cristiana, precisamente como la
unidad en la diversidad”.–James D. G. Dunn, The Epistle to the Galatians, p.
106.
¿Cuán abiertos deberíamos estar a los métodos de evangelización y de
testificación que nos sacan de nuestra “zona de confort”? ¿Hay algunas formas
de evangelización que te molesten? Si es así, ¿cuáles son? ¿Por qué te
molestan? ¿Es posible que debas ser más abierto en cuanto a estas cosas?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Isaías 52 – Durante esta semana, PR cap.
31.
CONFRONTACIÓN EN ANTIOQUÍA
Algún tiempo después de la consulta de Pablo en Jerusalén, Pedro visitó
Antioquía, en Siria, la ubicación de la primera iglesia gentil y la base de las
actividades misioneras de Pablo que se describen en Hechos. Estando allí, Pedro
comió libremente con los cristianos gentiles, pero cuando llegó un grupo de
cristianos judíos de parte de Jacobo, Pedro, temeroso de lo que podrían pensar,
cambió completamente su comportamiento.
- ¿Por
qué Pedro debería haber actuado más sabiamente? Comparar Gálatas 2:11 al 13 ( CB) con Hechos 10:28 ( CB ) . ¿Qué nos dice
su curso de acción acerca de cuán poderosamente arraigada puede estar la
cultura y la tradición en nuestra vida?
Algunos han pensado erróneamente que Pedro y los otros judíos que
estaban con él habían dejado de seguir las leyes del Antiguo Testamento en
cuanto a los alimentos limpios e inmundos. No obstante este no parece ser el
caso. Si Pedro y todos los cristianos judíos hubieran abandonado las leyes
judías de alimentación, ciertamente habría surgido un escándalo mayúsculo en la
iglesia. Si hubiera sido así, ciertamente habría quedado registrado en alguna
parte, pero no lo está. Es más probable que el problema haya tenido que ver con
la comunión con los gentiles. Debido a que los judíos veían a los gentiles como
impuros, algunos tenían por costumbre evitar lo más posible todo contacto
social con los gentiles.
Pedro mismo había luchado con este tema, y únicamente una visión de Dios fue lo que lo ayudó a ver las cosas con claridad. Al entrar a la casa de Cornelio, el centurión romano, Pedro dijo: “Vosotros sabéis cuán abominable es para un varón judío juntarse o acercarse a un extranjero; pero a mí me ha mostrado Dios que a ningún hombre llame común o inmundo” (Hech. 10:28). Aunque sabía que estaba mal, tenía tanto temor de ofender a sus compatriotas que volvió a sus antiguas costumbres. Por lo visto, así de fuerte era el poder de la cultura y la tradición en la vida de Pedro.
Sin embargo Pablo, al ver la actitud de Pedro, la llamó exactamente por su nombre: la palabra griega que utiliza en Gálatas 2:13 es hipocresía. Aún Bernabé, dijo Pablo, “fue también arrastrado por la hipocresía de ellos”. Palabras fuertes de un hombre de Dios a otro.
¿Por qué es tan fácil ser hipócrita? (¿O acaso será que tendemos a cerrar nuestra vista hacia nuestras propias faltas mientras buscamos ansiosamente las faltas en los demás?) ¿Qué clase de hipocresía encuentras en tu propia vida? Más importante aún, ¿de qué manera puedes reconocerla y luego sacarla de raíz?
Pedro mismo había luchado con este tema, y únicamente una visión de Dios fue lo que lo ayudó a ver las cosas con claridad. Al entrar a la casa de Cornelio, el centurión romano, Pedro dijo: “Vosotros sabéis cuán abominable es para un varón judío juntarse o acercarse a un extranjero; pero a mí me ha mostrado Dios que a ningún hombre llame común o inmundo” (Hech. 10:28). Aunque sabía que estaba mal, tenía tanto temor de ofender a sus compatriotas que volvió a sus antiguas costumbres. Por lo visto, así de fuerte era el poder de la cultura y la tradición en la vida de Pedro.
Sin embargo Pablo, al ver la actitud de Pedro, la llamó exactamente por su nombre: la palabra griega que utiliza en Gálatas 2:13 es hipocresía. Aún Bernabé, dijo Pablo, “fue también arrastrado por la hipocresía de ellos”. Palabras fuertes de un hombre de Dios a otro.
¿Por qué es tan fácil ser hipócrita? (¿O acaso será que tendemos a cerrar nuestra vista hacia nuestras propias faltas mientras buscamos ansiosamente las faltas en los demás?) ¿Qué clase de hipocresía encuentras en tu propia vida? Más importante aún, ¿de qué manera puedes reconocerla y luego sacarla de raíz?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Isaías 53 – Durante esta semana, PR cap.
31.
LA PREOCUPACIÓN DE PABLO
La situación en Antioquía evidentemente era tensa: Pablo y Pedro, dos líderes
de la iglesia, estaban en conflicto abierto. Y Pablo no se guarda nada al pedir
cuentas a Pedro por su comportamiento.
- ¿Qué
razones da Pablo para confrontar públicamente a Pedro? Gálatas 2:11 al 14 ( CB ) .
Desde el punto de vista de Pablo, el problema no era que Pedro hubiese
decidido comer con las visitas de Jerusalén. Las tradiciones antiguas sobre la
hospitalidad ciertamente habrían requerido eso.
El problema era “la verdad del evangelio”. Es decir, no era simplemente un problema de confraternización o prácticas gastronómicas. Las acciones de Pedro, en un sentido muy real, comprometían todo el mensaje del evangelio.
El problema era “la verdad del evangelio”. Es decir, no era simplemente un problema de confraternización o prácticas gastronómicas. Las acciones de Pedro, en un sentido muy real, comprometían todo el mensaje del evangelio.
- Lee Gálatas 3:28 ( CB ) y Colosenses 3:11 ( CB ) . ¿Cómo n os ayuda la verdad de
estos textos a entender la fuerte reacción de Pablo?
Durante la reunión de Pablo en Jerusalén con Pedro y los demás
apóstoles, habían llegado a la conclusión de que los gentiles podían disfrutar
de todas las bendiciones en Cristo sin tener que someterse primeramente a la
circuncisión. La actitud de Pedro ahora ponía en riesgo ese acuerdo. Allí donde
antes los cristianos judíos y gentiles se habían reunido en un ambiente de
confraternización abierta, ahora la congregación estaba dividida, y esto podía
llevar a tener una iglesia dividida en el futuro.
Según el punto de vista de Pablo, el comportamiento de Pedro implicaba que los cristianos gentiles eran creyentes de segunda clase, en el mejor de los casos, y creía que las acciones de Pedro presionarían a los gentiles a ceder si querían experimentar la plena comunión. Por ende, Pablo dice: “Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar?” ( Gál. 2:14 ( CB ) ). La palabra “judaizar” era una expresión común que significaba “adoptar un estilo de vida judío”. Se utilizaba para referirse a los gentiles que asistían a la sinagoga y participaban de otras costumbres judías. También era el motivo por el que Pablo a menudo llama “judaizantes” a sus oponentes de Galacia, los “falsos hermanos”.
Según el punto de vista de Pablo, el comportamiento de Pedro implicaba que los cristianos gentiles eran creyentes de segunda clase, en el mejor de los casos, y creía que las acciones de Pedro presionarían a los gentiles a ceder si querían experimentar la plena comunión. Por ende, Pablo dice: “Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar?” ( Gál. 2:14 ( CB ) ). La palabra “judaizar” era una expresión común que significaba “adoptar un estilo de vida judío”. Se utilizaba para referirse a los gentiles que asistían a la sinagoga y participaban de otras costumbres judías. También era el motivo por el que Pablo a menudo llama “judaizantes” a sus oponentes de Galacia, los “falsos hermanos”.
Por si fuera poco, además de las acciones de Pedro, Bernabé también se
contagió de este comportamiento, alguien que también era consciente de lo que
implicaba. ¡Qué ejemplo claro del poder de la “presión del grupo”! ¿Cómo
podemos aprender a protegernos de ser arrastrados en la dirección equivocada
por quienes nos rodean?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Isaías 54 – Durante esta semana, PR cap.
31.
PARA ESTUDIAR Y MEDITAR: Para un estudio más profundo
sobre el tema de la unidad y la diversidad en la iglesia, lee Elena de White, “La investigación de nueva luz”, en El otro poder,
pp. 45, 47; “Una explicación de las primeras
declaraciones”, en Mensajes selectos, t. 1, pp. 80-83; “El tacto”, en Obreros evangélicos, pp. 123-125;
y “Manuscript Release 898”, pp. 1.092, 1.093, en 1888 Materials, tomo 3. “Aun
los mejores hombres, si actúan por sí mismos, cometerán graves equivocaciones.
Mientras mayores responsabilidades se coloquen sobre el agente humano, mientras más encumbrado sea su cargo para determinar y controlar, más males hará con seguridad pervirtiendo mentes y corazones si no sigue cuidadosamente el camino del Señor. Pedro fracasó en Antioquía en los principios de integridad.
Pablo tuvo que resistirle frente a frente su influencia destructora. Esto está registrado para bien de otros, y para que la lección pueda ser una advertencia solemne para los hombres que están en cargos elevados, a fin de que no falten contra su integridad, sino que se adhieran a los principios”.–“Comentarios de Elena G. de White”, en Comentario bíblico adventista, t. 6, p. 1.108.
Mientras mayores responsabilidades se coloquen sobre el agente humano, mientras más encumbrado sea su cargo para determinar y controlar, más males hará con seguridad pervirtiendo mentes y corazones si no sigue cuidadosamente el camino del Señor. Pedro fracasó en Antioquía en los principios de integridad.
Pablo tuvo que resistirle frente a frente su influencia destructora. Esto está registrado para bien de otros, y para que la lección pueda ser una advertencia solemne para los hombres que están en cargos elevados, a fin de que no falten contra su integridad, sino que se adhieran a los principios”.–“Comentarios de Elena G. de White”, en Comentario bíblico adventista, t. 6, p. 1.108.
PREGUNTAS PARA DIALOGAR:
- 1.
Muy pocas personas disfrutan de la confrontación, pero a veces es necesaria.
¿En qué circunstancias una iglesia debería condenar el error y disciplinar
a aquellos que se rehúsan a aceptar la corrección?
- 2.
La Iglesia Adventista del Séptimo Día está creciendo en derredor del
mundo, y se vuelve cada más diversa al mismo tiempo. ¿Qué medidas puede
tomar la iglesia para asegurarse de que no se pierda la unidad en medio de
tanta diversidad? ¿Cómo podemos aprender a aceptar, e incluso disfrutar,
de la diversidad de culturas y tradiciones entre nosotros, mientras que al
mismo tiempo mantenemos la unidad?
- 3.
Al compartir el evangelio en una cultura diferente, ¿cuáles son los
elementos esenciales que no deberían cambiar y cuáles sí pueden cambiar?
¿Cómo aprendemos a distinguir entre lo que debe permanecer y lo que, de
ser necesario, podemos dejar de lado?
RESUMEN: La insistencia por parte de algunos cristianos judíos de que los
gentiles debían circuncidarse para convertirse en verdaderos seguidores de
Cristo presentaba una seria amenaza para la unidad de la iglesia. En vez de
permitir que este problema dividiera a la iglesia en dos movimientos
diferentes, los apóstoles trabajaron juntos, a pesar de tener conflictos entre
ellos, para asegurarse de que el cuerpo de Cristo permaneciera unido y fiel a
la verdad del evangelio.
Reavivados por su Palabra: Hoy, Isaías 55 – Durante esta semana, PR cap.
31
BIBLIA para estudiar aqui
BIBLIA para estudiar aqui
Esto fue tomado desde sitio web para ser presentado al mis amigos en el mundo:
http://www.escuela sabatica.cl
http://www.escuelasabatica.co
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